Bielorrusia impide la entrada a Pedro Marset (PCE) que iba a un acto del opositor “Mundo Mejor”

/Pravda Estado español

El pasado viernes 8 de junio, las autoridades de la República de Bielorrusia impidieron a Pedro Marset, miembro del Comité Federal del PCE, y junto a otros políticos europeos, la entrada en el país, quienes se dirigían a participar como representantes del Partido de la Izquierda Europea (PIE) en el seminario 'Crisis y Democracia' organizado por el partido reformista “Mundo Mejor”. La Secretaria de Relaciones Internacionales del PCE mostró su solidaridad con Marset y el más firme rechazo a la "actitud" de las autoridades bielorrusas, y señaló que “pedirá una explicación por parte de las mismas a tan condenable hecho”.

¿Pero que es 'Mundo Mejor'? Se preguntarán nuestros lectores y lectoras. Esta organización tiene sus orígenes en el Partido de los Comunistas bielorrusos (PKB) nacido en 1991, que a diferencia del Partido Comunista de Bielorrusia (PCB), organización marxista-leninista escindida en 1996 del PKB, deciden oponerse al gobierno progresista de Alexander Lukashenko, abrazar tesis europeístas, entrar en la estructura del PIE, y modificar su nombre y símbolos por "Izquierdistas Unidos-Fair World (Mundo Justo)". 

Durante los últimos años se han unido a otras organizaciones opositoras del país, realmente unos extraños compañeros de viaje, donde se encuentran socialdemócratas, conservadores, y liberales, todo en la misma coalición europeísta y pro-occidental. Ésta se denomina "Fuerzas Democráticas Unidas", surgida tras la coalición +5, formada entre otros, por la Asamblea Socialdemócrata, el Movimiento "Por la Libertad" (aboga por la integración en la UE), Renacimiento (conservadores miembros del Partido Popular Europeo), la Campaña "Por el libre desarrollo de la Empresa", o el Partido Unidad Civil, también socialdemócrata.

Su oposición al gobierno de Lukashenko llega a hacerles estrechar lazos con el imperialismo. Así, en 2007, Sergey Kaliakin, líder del partido y junto a otros amigos de coalición, visita los Estados Unidos y se reune con congresistas de las dos Cámaras (Senado y Congreso), oficiales del Departamento de Estado y miembros de o­ng’s, con los que discute "sobre el papel que EEUU debe tener en los procesos de Bielorrusia", palabras del mismo Kaliakin.

Estas posiciones atlantistas y contrarrevolucionarias (seguidas por el PIE, con el PCF y el PCE a la cabeza, llegando a criticar la expulsión de la OSCE del país y hablar de "simulacro" electoral) alcanzarían su cenit al apoyar el golpe de Estado o revolución de colores que hace dos años vivió Bielorrusia, con la sombra del imperialismo detrás.

Así pues, este nuevo escándalo del PCE y el PIE junto a su aliado bielorruso es un capítulo más en la larga lista de los esfuerzos conjuntos -junto al imperialismo- por derribar al gobierno progresista, que por cierto, es apoyado críticamente por el Partido Comunista de Bielorrusia (PCB).

El primer secretario del Comité del Partido en Minsk, Igor Karpenko, ha explicado que con Lukashenko Belarús "ha sido capaz de afrontar la crisis económica garantizando un desarrollo sostenible y moderno del país, de mantener la legalidad frente a las redes mafiosas, preservar la unidad nacional y afrontar las amenazas del imperialismo euro-gringo que se empeña estúpidamente en llamar a Lukashenko “el último dictador de Europa” y, sobre todo, evitar una gran disparidad en la distribución del ingreso."