/Pravda Estado español
En las últimas semanas las fuerzas 'rebeldes' -financiadas, preparadas, armadas y apoyadas por el imperialismo- están sufriendo numerosas bajas, deserciones, pérdidas irreparables, y derrotas de suma importancia para el transcurso de la guerra en Siria.
Esto se debe a la importante ofensiva llevada a cabo por el Ejército por tierra y aire, acabando con las posiciones 'rebeldes' con facilidad, expulsándolos de diversas zonas, especialmente la capital, Damasco, y posteriormente de Alepo, que era considerado un bastión de los 'rebeldes'. También cabe destacar como la Inteligencia Siria logró desbaratar un golpe de estado que preparaba el presidente del Consejo de ministros, Riad Hijab, lógicamente con el beneplácito extranjero.
Así pues, la guerra no avanza como el imperialismo desearía, a pesar de sus enormes esfuerzos por liderar a los 'rebeldes' a la victoria: donando decenas de millones a las distintas facciones, entrenándoles para la guerra en Turquía, proporcionando armamento y mercenarios, presionando a diplomáticos sirios para que deserten por dinero, preparando un golpe de estado desde dentro...
Tal como ocurrió en Libia, si los países implicados (especialmente EEUU, Turquía, Israel, Reino Unido, y las dictaduras árabes de la zona) no consiguen entrar directamente en la guerra, sus 'rebeldes' no serán capaces por sí solos -y a pesar, como se ha señalado, de todo el apoyo recibido- de vencer al firme Gobierno Sirio.
Este desolador panorama lógicamente ya ha sido analizado por el imperialismo, que ve como peligran sus planes para Medio Oriente. Así pues, en una visita de la secretaria de estado de EEUU a Turquía para discutir “detalles reales sobre la planificación de las operaciones”, destacó a una pregunta de los periodistas la importancia de establecer una zona de exclusión aérea en Siria.
¡Y que casualidad! Al día siguiente los grandes medios de comunicación empiezan a escribir artículos (Más de 100 en las últimas horas en español) sobre dicha necesidad. En un artículo propagandístico de El País, citaban a un rebelde: “El régimen”, explica Abu Usama, “no ha usado todo su poder aéreo todavía”. “Si contásemos con una zona de exclusión aérea”, continúa, “podríamos ponernos frente a ellos más fácilmente”.
Propaganda de guerra a parte, parece poco probable que sea una medida que el imperialismo pueda llevar a cabo. Para establecer una zona de exclusión aérea, se necesita -como ocurrió lamentablemente el Libia- que se apruebe en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Rusia ya indicó hace un mes que no apoyaría ningún corredor humanitario o zona de exclusión, y probablemente China también adopte esta postura, lo que evitaría su aprobación.
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